
17 Años construyendo caminos de Esperanza e Inclusión
Hoy, 25 de junio de 2025, en Fundación Crescendo hacemos una pausa para mirar atrás con el corazón lleno de gratitud. Conmemoramos 17 años desde un hito que nos dio estructura y un nuevo nombre, el nombramiento de nuestro primer Consejo Directivo el 25 de junio de 2008. Pero nuestra historia, como la de tantas obras que nacen de la convicción, comenzó mucho antes, en el susurro de una necesidad y en el sueño de un futuro más digno para todos.
Nuestras raíces se hunden en el año 2002. En ese entonces, la misionera estadounidense Shana Harrison, trabajando bajo el alero de la Iglesia Metodista de Chile, observó con una mezcla de preocupación y esperanza una realidad que no podía ser ignorada. Veía a jóvenes y adultos con discapacidad intelectual egresar del sistema escolar para enfrentarse a un vacío, a una vida sin espacios para continuar su desarrollo, a menudo siendo tratados con una fuerte discriminación que opacaba su potencial.
De esa observación nació el «Centro de Acogida La Esperanza», una iniciativa de fe y servicio que buscaba ser, precisamente, eso: un faro de esperanza. Este proyecto precursor se materializó en dos espacios complementarios que sentaron las bases de nuestra identidad:
- El «Taller Esperanza», que con el tiempo se convertiría en nuestro Centro Diurno, un lugar para el desarrollo de habilidades y la participación activa.
- El «Hogar La Esperanza», que evolucionó para ser nuestra Casa Comunidad, un espacio residencial que ofrecía no solo un techo, sino la calidez de una familia.
La creciente demanda de los servicios del «Centro de Acogida La Esperanza» hicieron evidente la necesidad de una estructura más formal y autónoma que permitiera a la misión crecer de manera sostenible. Así, el 1 de agosto de 2007, se dio el primer paso legal con la constitución de la “Fundación Domun”. Este acto fue la materialización de un compromiso que ya existía en la práctica. Agradecemos profundamente a quienes fueron parte de esta historia como nuestra querida Shana Harrison, Hernán Quililongo, Loren Jay Lorig y Kathleen Park Bubb.
Poco después, buscando un nombre que reflejara nuestro anhelo de crecimiento y desarrollo, el 25 de junio de 2008, en una reforma clave de estatutos, la entidad adoptó su nombre definitivo y lleno de promesa: «Fundación Crescendo».
El 25 de junio de 2008, que se nombró al primer Consejo Directivo que guiaría a la recién bautizada Fundación Crescendo. Hoy honramos la memoria, el trabajo y la visión de ese grupo diverso y comprometido de nueve pioneros que asumieron la posta para dirigir nuestra institución en sus primeros pasos formales:
- Norma Acuña
- Patricia Arentsen
- Neftali Aravena
- Domingo Santa María
- Victor Hawkins
- René Naranjo
- Hernán Quililongo
- Eliseo Salazar
- Roberto Stevens
Su disposición y visión fueron fundamentales para transformar un proyecto de base en una organización sólida y con una gobernanza clara, capaz de enfrentar los desafíos del futuro.
El camino recorrido en estos 17 años no ha sido fácil. Hemos enfrentado crisis y desafíos que nos han obligado a reinventarnos, como el cierre de proyectos tan queridos como el Café Te Bicité. Pero cada obstáculo ha sido una lección de resiliencia y una oportunidad para reafirmar nuestro compromiso, llevándonos a evolucionar hacia modelos de mayor impacto, como nuestro actual proyecto de co-construir el primer «Barrio Gastronómico Inclusivo» en Chile.
En este viaje, hemos sido guiados por directorios y presidentes que han sabido interpretar los tiempos, desde Domingo Santa María, Neil Walbaum y René Naranjo Sotomayor hasta nuestro actual presidente, Ricardo Tucas Rojas. Cada uno ha aportado su visión y liderazgo para que la semilla plantada en 2002 siga creciendo.
En este aniversario, extendemos nuestra más profunda gratitud a cada fundador, director, colaborador, voluntario, familia y socio que ha sido parte de esta historia. Ustedes son el corazón de Crescendo. Miramos al futuro con la certeza de que, juntos, seguiremos trabajando para que cada persona, sin importar su condición, pueda alcanzar su máximo potencial en una sociedad que valore la diversidad como su mayor riqueza.
¡Gracias por 17 años de confianza y apoyo! La historia de Crescendo continúa, y los invitamos a seguir escribiéndola con nosotros.



Comentarios recientes